¡Por fin llegaron los colombianos!

El sábado pasado nos invitaron al 80 cumpleaños de Ronaldo, un padre jesuita que vive en la curia. La invitación consistía en un almuerzo a las 12h (sí, aquí se come muy temprano). Esa mañana Mila, Fede y yo nos levantamos para salir pronto de casa y así pasar por el centro antes de ir a la curia. El objetivo, comprar un regalo al cumpleañero, no podíamos presentarnos sin nada. Y, la verdad, si comprar un regalo para un hombre ya es complicadísimo (no estoy de acuerdo, comprarme un regalo a mi es mucho más fácil que a Isa), no os quiero contar si además es cura… Pero bueno, decidimos no complicarnos la vida, porque si no nos volvíamos locos. Ronaldo es un estadounidense que lleva en Manaus 45 años, así que ya es medio manauara. Aunque es de los más elegantes (siempre lleva camisas o polos), decidimos regalarle una camiseta que vimos y nos gustó mucho. Como ya explicó Fede en una de las primeras entradas, aquí en carnavales hay dos bandos, uno por cada buey: los caprichosos y los garantidos; y como Ronaldo no se pronuncia demasiado en ese aspecto, nunca hemos oído referencia alguna sobre sus preferencias de boi (buey), decidimos cogerle una camiseta en la que decía “Garanchoso”, que viene siendo una mezcla entre los dos. Cuando le dimos el regalo pareció gustarle, ahora sólo falta que use la camiseta, aunque sea para dormir. El almuerzo fue estupendo; había cordero, cerdo, farinha, puré de patata, ensalada… Estaba todo muy bueno. En el postre cantamos el parabéns y tomamos un trozo de tarta (verde y amarilla, como no podía ser de otra manera); también había dos tipos de helados muy ricos, uno de limón y el otro de bacurí (otra fruta típica de aquí, algún día haremos un post hablando sólo de frutas amazonenses). Después de comer nos quedamos un ratito más en la curia conversando, rato en el que Fede aprovechó también para beber alguna cerveza que otra (hay que decir que aquí ha bajado considerablemente su ritmo de cerveceo comparado con España). También aproveché para tomar unos vasitos de cachaça artesanal.

 

Comida que degustamos en el cumpleaños

El cumpleañero, Ronaldo, con nuestro regalo

Esa misma noche estaba prevista la llegada de dos nuevos voluntarios (creo que no os habíamos comentado nada de su inminente llegada), Jairo y Carmen, matrimonio colombiano. Sobre las 22:00 los trajo Anselmo (el cura responsable de los voluntarios) a casa, les hicimos un recorrido (para que conocieran su nueva morada) y les dejamos descansar del viaje. No les dimos de cenar porque la compañía de vuelo Copa ya los aterrizó cenaditos. Al día siguiente, nos fuimos al centro para que conocieran el mercadillo de artesanías que montan los domingos, ya hablamos de ese mercadillo en otra entrada, comimos allí y nos volvimos para casa, con el tiempo justo para ducharme y salir porque teníamos una exhibición de artes marciales organizada por Ney (el profesor de Capoeira). Isa prefirió quedarse en casa sobando y me fui para allá con los colombianos. Cuando llegamos estaban haciendo combates de Muay Thai y se daban unas galletas de cuidado, todos los combates terminaban en KO y, en los raros casos en los que llegaban al segundo round, una chica de buen ver se paseaba con un cartelito de cartón para regocijo del personal asistente, en fin todo muy auténtico. Cuando terminaron los combates, la mayoría de la gente se fue e hicieron una exhibición de capoeira que también valió como fiesta de despedida para uno de los maestros, Brutus, amigo de nuestro centro, que se muda a otra ciudad, al terminar los combates nos volvimos a casa, recogí a la vaga de Isa (vaga no, sólo que no me gustan las peleas) y nos volvimos para donde había sido el espectáculo a alternar con la gente de capoeira y tomarnos unas cervezas (¿veis? En cuanto acabaron las luchas lo acompañé J). Como era domingo, no quise liarme demasiado y nos volvimos bastante pronto.

En la puerta de nuestra casa, saliendo hacia el centro

Carmen y Jairo en el puerto

Tomando una cervecita mientras Mila, Jairo y Carmen veìan unos puestos

Comiendo unos "platos combinados" 

Los machos de la casa

Repartiendo collejas

En otro orden de cosas, están empezando a decorar las calles con motivo de la copa, esto corre a cargo de los vecinos que cuelgan tiras de papeles de los colores de la bandera (verde, amarillo, azul y blanco) por encima de las calles (estilo a los toldos de San Juan, referencia para los pacenses) cada casa de la calle tiene que poner una ayuda (10 R$) para sufragar los gastos del asunto. En las zonas turísticas se lo curran mucho y pintan también la carretera con motivos futbolísticos, en nuestro barrio la cosa no es para tanto, aunque es muy bonito y da algo de sombra. El mundial está al llegar (¡¡HORROR!!) está todo lleno de camisetas amarillas (yo creo que aunque no estuviera cerca el mundial, todo estaría tan lleno de camisetas como ahora porque no he visto tan fieles amantes de su bandera como los brasileños; en cuanto pase el mundial os confirmaré mis sospechas) y todo apunta a que va ser la locura, tanto es así que, cuando juega Brasil o hay partido en Manaus, cierran los negocios, bancos, universidades, etc. Nos enteramos de las protestas contra la copa de la misma manera que vosotros, por la prensa española, aquí en Manaus no se están produciendo manifestaciones ni protestas y, hasta ahora, ningún brasileño “no cura” nos ha expresado queja alguna sobre los gastos (bastante altos) de la copa.

Habíamos pensado en hacer un viajecito en junio a Alter do Chao (un sitio con playas muy chulas), en los días más intensos de fútbol, para huir de Manaus pero, como es época de cheia (nivel alto del río), no merece la pena porque no va a haber playas. Así que nos quedaremos por aquí aguantando, entre otras cosas, el ruido de las bubucelas.

El making of de los adornos callejeros

Algunos muy currados tienen el dibujo de la bandera

Pintura en el suelo de los bueyes famosos Caprichoso (el azul) y Garantido (el rojo)

Y algunas fotos que no sabemos colocar:

De camino al bus está esta pintada que prohíbe tirar basura...

Por causa de la cheia, las casas más humildes se inundan

Muchas de las fotos fueron hechas por Jairo y Carmen; agradecemos, por supuesto, su aportación.

Abrazos para todos. Gracias por leernos y por vuestros comentarios.

Fede e Isa.